Me llamo Daniela y me cuesta expresarme muchísimo. Cuando me pongo nerviosa me sudan las manos y seguramente mientras escribo estas lineas el papel parezca haber navegado entre las olas del mar. A veces soy una cobarde, tímida y me siento diminuta entre la gente. Esa sensación de desaparecer y no querer decir nada. No ser nada. Sin embargo, a veces soy valiente. Miro a los ojos, sonrío y vivo. No temo al tiempo ni a las multitudes, no me arde el corazón y me tiembla el pulso. Amo llorar y reír. Amo desnudar mi alma ante una hoja de papel. Y esa es la razón, la razón por la que amo escribir. Para desahogarme y liberarlo todo. Todo lo que tengo dentro. Y quizás esta no sea la manera perfecta de explicarme. Quizás esto no sea lo que soy. Quizás es solo lo que siento.